Zapa es cerrajero en un pueblo pequeño y tranquilo de la provincia de Buenos Aires. El Polaco, dueño de la cerrajería, lo manda a hacer un trabajo especial, consecuencia del cual queda detenido.
Su tío Ismael, policía retirado, logra sacarlo de la comisaría. El Polaco ha desaparecido y Zapa debe reconstruir su vida fuera del pueblo como un aspirante en la policía bonaerense.
Zapa debe adaptarse a su nueva realidad. Toma el curso de preparación, trabaja en una comisaría, tiene un romance con una profesora y debe convivir con la extraña ficción en que se va convirtiendo su vida.